Liberar el potencial de un equipo: El poder de utilizar el análisis de Meta-Programas en el desarrollo de equipos
Introducción:
En el panorama empresarial actual, el trabajo en equipo se ha revelado como uno de los factores más agudos para alcanzar el éxito. Los equipos con diversas capacidades y perspectivas suelen eclipsar a las personas que trabajan solas. Sin embargo, liberar todo el potencial de un equipo requiere un profundo conocimiento de los estilos de pensamiento individuales de cada uno de sus miembros. Al tener esta conciencia, los líderes pueden aprovechar los puntos fuertes de cada miembro y superar cualquier debilidad, lo que conduce a una mejor toma de decisiones, una mayor productividad y unos resultados superiores.
La Programación Neurolingüística (PNL) se utiliza ampliamente en las empresas desde hace bastante tiempo y ha demostrado ser una valiosa herramienta de desarrollo. Con el auge de la tecnología y la innovación, los profesionales disponen de diversas herramientas de PNL que les ayudan a facilitar que personas o equipos consigan los resultados deseados. Una de esas herramientas infrautilizadas en PNL son los «Metaprogramas» o estilos de pensamiento.
Muchos profesionales siguen prefiriendo utilizar herramientas de evaluación de la personalidad que tienden a clasificar a los individuos en sólo cuatro descriptores o puntos y proporcionan una visión general. Este enfoque puede ser demasiado restrictivo y no suele tener en cuenta la complejidad del proceso de pensamiento de un individuo en diferentes contextos. El análisis de metaprogramas llena este vacío.
En PNL, aprendemos la importancia de modelar el comportamiento. Un aspecto clave es comprender nuestros valores, creencias, procesos de pensamiento y percepciones en diferentes situaciones. Examinando nuestros metaprogramas, podemos analizar y descubrir la diversidad cognitiva subyacente que influye en cómo pensamos y nos comportamos en determinados contextos. He conocido a muchos PNL que no comprenden el poder de los metaprogramas y, para ser sincero, yo era uno de ellos.
Identificar y aplicar los metaprogramas propios de cada individuo requiere una escucha activa y la observación de las señales verbales y no verbales. Existen herramientas online que te ayudarán en este proceso. Al comprender los estilos cognitivos, los profesionales pueden ayudar a las personas a alcanzar el máximo rendimiento. Por desgracia, mucha gente tiende a simplificar en exceso las aplicaciones de los metaprogramas y a ignorar la naturaleza dinámica de su uso en contextos específicos.
Comprender los patrones de los metaprogramas:
Utilizar el análisis de metaprogramas ayuda a los individuos a obtener una comprensión más profunda de sus preferencias cognitivas, valores y motivaciones. Con conocimientos sobre la resolución de problemas, la toma de decisiones y las interacciones interpersonales, los patrones de pensamiento capacitan a las personas para liberar todo su potencial y alcanzar sus objetivos.
Una de las ventajas significativas de utilizar metaprogramas para el desarrollo de equipos es que permiten a las organizaciones obtener información valiosa sobre la mentalidad colectiva de sus equipos. Analizando los metaprogramas colectivos, los equipos pueden identificar sus puntos fuertes y débiles y diseñar estrategias para mejorar la dinámica y la comunicación del equipo.
Cuando trabajes con equipos, es una buena idea evitar términos técnicos como «metaprogramas», que pueden resultar poco claros para algunas personas. En su lugar, es mejor utilizar términos más familiares como «patrones de pensamiento» o «estilos cognitivos» para referirse al mismo concepto. Esto ayuda a garantizar que todos los miembros del equipo están en la misma página y pueden entender el debate sin sentirse excluidos, sobre todo cuando se explica que ningún modelo es mejor que otro, sino que todos son necesarios para los equipos en distintos momentos.
El Poder de los Estilos de Pensamiento en el Desarrollo de Equipos es:
1. Mejora de la comunicación:
Las personas con distintos estilos de pensamiento pueden tener formas distintas de interpretar la información, lo que podría dar lugar a malentendidos y dificultar la colaboración. Al reconocer y apreciar estas diferencias, los equipos pueden desarrollar estrategias de comunicación más eficaces que se adapten a las necesidades únicas de cada individuo.
2. Mejora de la solución de problemas:
Al reunir a personas con distintos enfoques cognitivos, los equipos pueden aprovechar diversas perspectivas para analizar los retos y desarrollar soluciones innovadoras. Los patrones de pensamiento ayudan a los equipos a aprovechar la diversidad para resolver problemas con eficacia y comprender mejor los puntos fuertes y débiles en distintas situaciones.
3. Mayor adaptabilidad:
Al reconocer las preferencias y puntos fuertes únicos de cada miembro del equipo, los líderes pueden asignar a sus equipos las tareas y responsabilidades que mejor se ajusten a sus capacidades. Este enfoque también genera confianza y respeto, fomentando un entorno de trabajo propicio.
4. Resolución de conflictos:
Reconocer que los distintos miembros del equipo pueden tener enfoques únicos para gestionar los conflictos y reconocer estas diferencias permite desarrollar estrategias que se adapten a las preferencias individuales.
5. Planificación estratégica:
Analizando las preferencias cognitivas y los estilos de pensamiento de los miembros del equipo, los líderes pueden obtener información valiosa sobre su equipo. Esta información puede entonces alinear las tareas y responsabilidades con los individuos con los puntos fuertes cognitivos más relevantes, mejorando la satisfacción de las funciones del equipo y el rendimiento general.
6. Cohesión y confianza del equipo:
Los patrones de pensamiento permiten comprender cómo perciben el mundo los individuos, incluidos sus valores, creencias y motivaciones. Cuando los miembros de un equipo confían y respetan los estilos de pensamiento de los demás, es más probable que trabajen juntos con eficacia.
7. Identificación de lagunas de cualificación y contratación estratégica:
Integrar los patrones de pensamiento en el proceso de contratación permite crear perfiles de trabajo específicos y evaluar a los candidatos en función de las necesidades del equipo, garantizando que los nuevos miembros encajen mejor en el equipo y abordando las lagunas de cualificación con mayor eficacia.
8. Comunicar con impacto
Cada palabra que utilizamos tiene el poder de elevar o dañar a las personas. Al comprender el estilo de comunicación de nuestro equipo, podemos aprovechar el lenguaje para guiarles hacia un cambio o adaptación positivos. Al comprender y trabajar con cada miembro del equipo, el líder habla y actúa en beneficio de todo el equipo.
Cómo lo hacemos:
La mejora del rendimiento del equipo abarca tres elementos que proporcionan:
- Descodificar y dar retro-alimentación a los individuos.
- Llevar a cabo un Día del Equipo- para que los miembros del equipo se descodifiquen mutuamente.
- Idear un perfil de entrenador en la sala.
Proporcionar a las personas orientación personalizada y comentarios sobre sus metaprogramas les ayuda a compartir sus pensamientos, opiniones y percepciones. Esta retroalimentación les permite comprenderse mejor a sí mismos para poder comprender a los demás. El análisis preciso de los metaprogramas permite a los individuos identificar sus puntos débiles y sus áreas de crecimiento, lo que les permite formar estrategias para mejorar sus habilidades.
Celebración de un Día del Equipo
Al dar prioridad a la comprensión de los demás, los miembros del equipo se comprenden mejor entre sí.
Durante el Día del Equipo, todos trabajan con un folleto personalizado que contiene información relevante y ejercicios relacionados con su trabajo. Cada miembro del equipo dispone de una guía de referencia rápida para acceder fácilmente a los distintos patrones de pensamiento y a sus definiciones.
El facilitador, guiará al equipo a través del folleto, aportando ideas sobre cómo acercarse a los demás y comunicarse con ellos para motivarlos e inspirarlos.
Durante la sesión, se explican los criterios o valores individuales, se explica cada metaprograma y los grupos de metaprogramas y se describen en lenguaje corporal y verbal dando el impacto de cada uno. Se realizan ejercicios específicos en grupo para profundizar en la comprensión del equipo.
La cooperación mejora suavemente si se comprenden los estilos cognitivos de los miembros del equipo. Por ejemplo, un directivo y un colega pueden tener estilos de pensamiento diferentes. Aun así, pueden encontrar formas de complementarse mutuamente reconociendo y apreciando sus diferencias de comunicación y motivación. Así podrán descubrir que sus perspectivas combinadas son más eficaces.
Los perfiles individuales de los equipos se muestran en la sala. Suelen ser anónimos para ayudar al equipo a centrarse en el perfil y no en el individuo. La tarea principal de cada participante es comentar cada póster en relación con los puntos fuertes del perfil, las áreas de mejora, cómo ese perfil puede ayudarle a crecer y las posibles fricciones e irritaciones que pueda tener con esos perfiles.
La jornada también incluye actividades para comprender los comportamientos del departamento y las necesidades del cliente.
Resultados de la jornada para los participantes:
1. Entender mi propósito y por qué hago lo que hago:
Esto ayudará a los participantes a comprender cómo se alinea su trabajo con sus valores y su propósito.
2. Comprender el impacto de nuestro departamento y empresa en nuestros clientes y consumidores:
Esto ayudará a los participantes a comprender cómo mejorar los procesos y obtener mejores resultados.
3. Comprender qué me motiva y cómo me comunico:
Esto ayudará a los participantes a tener un conocimiento más profundo de sí mismos y de cómo comunicarse eficazmente con compañeros y clientes.
4. Identifica posibles áreas de conflicto y aprende a evitar que surjan:
Esto mejorará la colaboración y la productividad del equipo.
5. Aprende a transformar los conflictos en oportunidades de crecimiento y apoyo:
Esto fomentará relaciones más sólidas con compañeros y clientes, creando un entorno de trabajo más positivo.
6. Establecer redes con otras personas:
Esto ayuda a los participantes a ampliar su comprensión de la industria y a desarrollar enfoques innovadores para su trabajo.
Cartel «El entrenador en la sala
El equipo se queda con dos carteles: uno muestra los patrones de pensamiento colectivo del equipo, y el otro es un cartel del entrenador en la sala.
El póster del entrenador en la sala destaca los puntos débiles del equipo (aunque el término más adecuado es punto ciego). Cuando se reúnan, pueden consultar el póster para acordarse de hacer las preguntas que normalmente no harían.
Los beneficios continuados de la jornada y los carteles son:
1. Mejora de la comprensión:
Los miembros del equipo pueden comprender mejor sus propios patrones cognitivos y los de sus compañeros. Esta toma de conciencia puede mejorar la comunicación y la colaboración, ya que los miembros del equipo pueden adaptar sus estilos de comunicación a las preferencias de los demás.
2. Mejorar la capacidad de preguntar
Comprender los metaprogramas permite a las personas formular preguntas más perspicaces y específicas. Esto puede ser especialmente valioso en los procesos de resolución de problemas y toma de decisiones, ya que los miembros del equipo aprenden a abordar los retos desde perspectivas diferentes.
3. Revisión anual y mejora continua:
La práctica del análisis de metaprogramas puede incorporarse a las revisiones anuales, fomentando la mejora continua dentro del equipo. Los miembros del equipo pueden reflexionar sobre sus preferencias de metaprograma, identificar áreas de crecimiento y establecer objetivos de desarrollo personal.
4. Dinámica y composición del equipo:
El proceso anima a los equipos a considerar la diversidad de perfiles de metaprogramas dentro del grupo. Esta conciencia puede utilizarse al formar equipos o añadir nuevos miembros, garantizando una mezcla equilibrada de enfoques cognitivos que contribuyan a un equipo más completo y eficaz.
5. Exhibición prominente y recordatorio constante:
Mostrar los perfiles de equipo de forma destacada sirve como recordatorio constante para que los miembros del equipo sean conscientes de sus preferencias cognitivas y las de sus compañeros. Este refuerzo visual puede ayudar a mantener la atención en la comprensión y adaptación a los distintos estilos de comunicación.
6. Oportunidades de trabajo en red:
Animar a los miembros del equipo a trabajar en red con personas que tengan perfiles de metaprogramas diferentes o puntos fuertes complementarios puede dar lugar a un intercambio más rico de ideas y perspectivas. Esta diversidad puede estimular la creatividad y la innovación dentro del equipo.
En resumen, el análisis de metaprogramas puede ser una herramienta valiosa para fomentar la autoconciencia, mejorar la comunicación y optimizar la dinámica de equipo. La naturaleza continua del proceso, junto con su integración en las prácticas del equipo, contribuye a una cultura de aprendizaje y desarrollo continuos.
Conclusión:
Lograr un rendimiento óptimo del equipo es un factor de cambio para cualquier organización. La clave está en comprender el poder de los patrones de pensamiento (metaprogramas). Evalúa los estilos de pensamiento de los individuos y les ayuda a comprender cómo perciben el mundo y reaccionan ante distintas situaciones.
Aprovechando los patrones de pensamiento (metaprogramas), puedes ayudar a los equipos a comunicarse, resolver problemas, adaptarse, resolver conflictos, planificar estratégicamente y trabajar para alcanzar objetivos comunes. Este conocimiento puede mejorar el rendimiento, la moral y la colaboración del equipo.
A medida que las empresas evolucionan, se hace imperativo comprender los diferentes estilos de pensamiento y utilizarlos adecuadamente. Hacerlo ayuda a los equipos y a las organizaciones a adelantarse a los acontecimientos, optimizar su rendimiento, adaptarse a los nuevos retos y lograr un éxito sostenido.
Hay que reconocer el enfoque del Dr. Jaime Leal para mejorar el rendimiento de los equipos mediante la actualización del Equipo F5, a Jaap Hollander, que desarrolló MindSonar (análisis de metaprogramas en línea) y a Shelle Rose Charvet por la elaboración de perfiles LAB.