La mayoría de la gente ya es bastante buena estropeando relaciones y metiendo la pata en la comunicación. Cada persona tiene un estilo de pensamiento diferente. Y a la gente le suele gustar su propia forma de pensar, es con los demás con quienes tiene problemas. Mira a tu alrededor y verás mucha irritación, ira, frustración y conflicto. ¿Cómo lo hacen? ¿Cómo consiguen crear todos estos problemas? O aún más importante: ¿Cómo lo haces? Echemos un vistazo a siete formas eficaces y probadas por el tiempo de frustrarse a través de los estilos de pensamiento. Siete formas probadas de volverte loco con los Metaprogramas.
¿Qué son los Metaprogramas?
Los metaprogramas son elementos de tu mentalidad, cosas como «hacia» (centrarse en los objetivos) frente a «lejos de» (centrarse en los problemas). Tu mentalidad es una combinación de Metaprogramas y valores. Tu mentalidad determina a menudo lo que haces y cómo te sientes.
1. Las personas con un estilo de pensamiento diferente apestan
Empecemos por una de las formas más eficaces de frustrarse: creer que tu propio estilo de pensamiento es el mejor del mundo. Por no decir el único. Por ejemplo, digamos que piensas en términos de futuro y te gustan las opciones. Entonces podrías llamar simplemente «cobarde anticuado» a cualquiera que piense en términos de pasado y procedimientos. Es una gran técnica, porque te garantiza que te encontrarás con cobardes anticuados en todas partes.
Principio Rector: Mis Metaprogramas son los únicos Metaprogramas sanos que existen.
2.Desajusta proactivamente y con grandetalle
Permíteme que te explique la jerga: «desajustar» significa que te centras en lo que es malo o incorrecto. Su contrapartida es la «adecuación»: buscar lo que es correcto y bueno. Si desajustas proactivamente, significa que lo haces sin pensar mucho en ello. Simplemente lo haces todo el tiempo. Y si no coincides en todos los detalles, tienes un gran número de cosas en las que puedes encontrar fallos. Vayas donde vayas, te darás cuenta de que hay muchas cosas que están mal, son incorrectas o simplemente ridículas. Especialmente cuando eres una persona emocional, ésta puede ser una técnica perfecta de autodesesperación.
Principio Orientador: Utiliza los metaprogramas «desajustado», «proactivo» y «específico» combinados entre sí.
3. Si no funciona, hazlo otravez
Tu estilo de pensamiento es genial para algunas cosas y no tanto para otras. Puede ser estupendo para diseñar edificios, pero no para jugar con los niños. Por eso algunas personas son flexibles en su forma de pensar. Así que aquí tienes otro gran potenciador de la frustración: si tu estilo de pensamiento no funciona, ¡hazlo un poco más! Por ejemplo, si te sientes muy responsable de las cosas y estás agotado, haz un poco más de eso: empieza a asumir aún más responsabilidades.
Principio Rector: Cíñete a tus Metaprogramas pase lo que pase.
4. Encuentra palabras despectivas para otros estilos de pensamiento
Si eres un pensador muy práctico, te gusta preguntar: ¿qué vamos a hacer con esto? ¿Cómo podemos utilizarlo? Y si trabajas o vives con alguien que es más bien un pensador teórico, le gusta preguntar: ¿cuál es la esencia? Ahora, ¡cuidado! Podrías tener la tentación de apreciarlos por su estilo de pensamiento diferente. ¡No lo hagas! En lugar de eso, llámalos «cerebrales», «vagos» o «pedantes». ¡Encontrar palabras despectivas para su estilo de pensamiento funciona muy bien como destructor de relaciones!
Principio Rector: Las personas con otros Meta Programas son tontas, feas y [fill in negative qualification here].
5. Intentar motivar a la gente sin entenderla
A veces quieres sugerir a la gente lo que sería bueno hacer. Y su estilo de pensamiento suele diferir del tuyo. ¡Y esto te proporciona otra gran oportunidad para la autofrustración! Digamos, por ejemplo, que tú piensas en términos de objetivos que quieres alcanzar, y ellos piensan en términos de problemas que quieren evitar. Así que describe vívidamente las cosas que pueden conseguir con tus planes. Y responden con la mirada perdida. ¡Una técnica de autofrustración impresionante!
Principio Rector: Todo el mundo tiene los mismos Meta Programas que yo.
6. Explícale a la gente lo que le pasa
Seguro que alguna vez alguien, un amigo, un compañero de trabajo, un familiar, quien sea, se te ha acercado y ha empezado a quejarse de ti. No hacías las cosas bien, querías las cosas equivocadas, no las tratabas bien, etc. Recuerda: si ellos pueden hacerte eso, ¡tú puedes hacérselo a ellos! Por ejemplo, si tú estás centrado en el futuro y ellos están centrados en el pasado, explícales -con todo lujo de detalles y detenidamente- cuánto mejor sería que se centraran más en el futuro. Igual que tú. ¿Y si protestan? Eso es porque están muy centrados en el pasado. Explícaselo.
Principio Rector: Explica claramente a los demás por qué utilizan Metaprogramas equivocados.
7. Rodéate de gente que piense como tú
Esta última técnica puede derrotar no sólo a individuos, sino a organizaciones enteras; incluso a países enteros. Y, sin embargo, es bastante sencillo de hacer. Sólo tienes que seleccionar a personas que tengan el mismo estilo de pensamiento que tú. Y luego simplemente negarte a hablar con nadie más. ¿Piensas en términos de objetivos? Trabaja sólo con personas orientadas a objetivos. Evita a cualquiera que piense en términos de problemas, sólo dificultan las cosas. ¿Te centras en los sentimientos? Sólo funciona con otros tipos de sentimientos. Evita a cualquiera que se centre en imágenes o historias, de todos modos sólo confunden las cosas. Y así sucesivamente. Lo mejor de todo es que puedes utilizar todas las demás técnicas que he descrito anteriormente para apoyar ésta.
Principio Rector: Encuentra personas con exactamente los mismos Meta Programas y habla sólo con ellas.
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